La natación es un gran ejercicio y puede ser una forma agradable de pasar tiempo con los demás, pero para algunas personas con psoriasis, el cloro de la piscina puede irritar su piel (sensible).
La psoriasis es una enfermedad relacionada con el sistema inmunológico que hace que las células de la piel se acumulen y se descamen rápidamente. La piel de una persona con psoriasis puede ser sensible a diferentes factores ambientales, incluido el cloro.
Si bien no hay mucha investigación sobre los efectos del cloro en personas con psoriasis, algunos estudios han demostrado que el agua clorada en las piscinas puede causar sequedad e irritación incluso en la piel de personas sanas. En un pequeño estudio con 58 atletas, 33 de los cuales eran nadadores competitivos que habían realizado dos horas de entrenamiento, se encontró que la exposición al agua clorada en piscinas afectaba la barrera cutánea y provocaba una pérdida significativa de humedad en la piel en comparación con no nadadores. Esta pérdida de agua provoca piel seca, con picazón y escamosa y puede dañar la barrera cutánea.
Las personas con afecciones de la piel como la psoriasis pueden ser más susceptibles a los efectos del agua clorada porque su piel es más sensible. Para las personas con psoriasis que disfrutan nadar o están considerando hacerlo, aquí hay algunas sugerencias que pueden resultarles de alguna ayuda.
Ducharse antes de nadar
La ducha protege la piel de algunos de los efectos del cloro, ya que elimina la materia orgánica que se puede acumular en la piel, como la piel muerta, el sudor o el sebo, y cuando el cloro entra en contacto con la materia orgánica forma cloraminas, que son tóxicas y tienen Se ha relacionado con irritación, inflamación, sequedad y daño a las células de la piel.
Por tanto, ducharse antes de nadar ayuda a reducir la producción de cloraminas.
Aplicar crema hidratante después de la ducha.
Después de la ducha y antes de meterte en el agua, puedes aplicar crema hidratante, que aporta una protección extra contra los efectos del cloro en la piel. Algunos productos para el cuidado de la piel contienen aceites, como vaselina o aceite de coco. Son más espesas que las lociones y pueden ayudar a mantener la piel hidratada. Los humectantes también protegen la piel de sustancias que pueden causar irritación, como el cloro. La loción es soluble en agua y puede disolverse y perder su protección en la piscina, por lo que es mejor utilizar productos para el cuidado de la piel que contengan aceites.
Usar protector solar para nadar al aire libre
Permanecer demasiado tiempo al sol puede provocar quemaduras solares, lo que puede empeorar aún más la irritación de la piel por cloro. Si está en una piscina al aire libre, aplique protector solar con SPF 30 o superior. Al aplicar protector solar, evite las zonas de piel inflamadas o agrietadas. Utilice protectores solares que contengan dióxido de titanio u óxido de zinc, que son particularmente eficaces para bloquear los dañinos rayos ultravioleta del sol (y ayudan a prevenir el cáncer de piel), y evite los protectores solares perfumados.
Protege tu cuero cabelludo usando un gorro de baño
Si sufre de psoriasis del cuero cabelludo, un gorro de baño puede ayudar a proteger su cuero cabelludo del cloro. Puede aplicar crema hidratante en el cuero cabelludo antes de ponerse un gorro de baño y, si la psoriasis afecta sus oídos, el uso de tapones para los oídos puede evitar que el cloro entre en sus oídos. Al elegir un gorro de baño, considere elegir uno hecho de un material suave.
Ducha post-nadar + Hidratación
Después de nadar, debes tomar una ducha tibia, que puede ayudar a eliminar el cloro de tu piel. Se recomienda utilizar un gel de baño y champú suave, evitando artículos de tocador con fragancias, colorantes y otros irritantes. Después del baño, seque suavemente la superficie de la piel con una toalla y vuelva a aplicar crema hidratante en la piel inmediatamente.
Ir a una piscina que esté esterilizada con agua salada.
Algunas piscinas utilizan agua salada en lugar de cloro para matar las bacterias. Algunos estudios han demostrado que los baños de agua salada pueden ayudar a reducir los síntomas de la psoriasis en placas. Dado que la mayoría de las piscinas públicas están cloradas y el cloro puede ser perjudicial para la piel, si sabe qué piscina utiliza un tratamiento de agua salada, eso puede funcionar para usted.
Tenga en cuenta que no todas las personas con psoriasis se ven afectadas por el agua clorada. Los efectos del cloro sobre la psoriasis varían de persona a persona, y esto puede depender de la sensibilidad de la piel de cada individuo o de la gravedad de su psoriasis.
Por lo tanto, si padece psoriasis, tome medidas de protección/cuidados antes y después de nadar para minimizar el riesgo de agravar su psoriasis por los efectos del agua de la piscina (cloro).